Seguro Responsabilidad Civil de Directivos y Administradores

Alguna vez hemos visto las siglas D&O, pero ¿que significa?. Es un seguro de responsabilidad civil que da cobertura frente a las reclamaciones que cómo directivo o administrador de la empresa pueda sufrir. Ya que se asume importantes responsabilidades, y se tiene el deber de atender por la actuación incorrecta, frente a socios, sociedad o terceros cómo acreedores, clientes, competidores, administración…

 

«Tomar decisiones como directivo o administrador es una función de alto riesgo»

 

Dicha responsabilidad, no sólo responde a su actuación incorrecta, sino que es subsidiaria por las personas que dependen de usted. Así con este tipo de seguro que cubre las reclamaciones que reciba, le protegerá y evitará que sea su patrimonio personal y el de su familia el que responda.

Este tipo de pólizas, le concede una defensa en el momento en el que reciba una reclamación, adelantando muchos de los gastos que se originan por defensa, fianzas..

 

Casos de reclamaciones a Directivos y Administradores

Un director financiero de una empresa de servicios financieros que dejaba la entidad fue demandado por irregularidades contables y por deudas que hasta el momento de la salida del directivo no fueron conocidas por la sociedad.

Un proveedor de materiales reclamó al director comercial y al presidente de una empresa de construcción por la insolvencia de su empresa derivado de la tardanza en el pago.

Una Sociedad Familiar en la que todos los hermanos son accionistas y directivos, fallece uno de ellos y su participación la hereda su mujer que acaba reclamando al resto de hermanos por manipulación fraudulenta de las cuentas para que la empresa reparta menos dividendos y ella reciba menos dinero de la misma.

Un accionista minoritario de una empresa de distribución demandó a todo el órgano de administración por entender que una modificación estatutaria ordenada por el accionista mayoritario, que ponía innumerables dificultades a la enajenación de acciones para accionistas con menos del 25%, causó un perjuicio a los accionistas minoritarios.

Los propios directivos de empresa familiar se demandaron unos a los otros, ya que cada demandante consideraba que la otra parte había sido el culpable de las pérdidas de la empresa en la anualidad anterior.

Los acreedores de una empresa solicitaron la declaración de concurso de la sociedad. El Juzgado de lo Mercantil estimó que el concurso debía declararse culpable pues los administradores no habían solicitado la declaración de concurso en el plazo de dos meses legalmente previsto al efecto. La Sentencia condenó a los administradores al pago del déficit patrimonial de la sociedad.

Una trabajadora se incorpora tras una baja de maternidad y demanda al director de recursos humanos, a su jefe y a todos los empleados que según ella están colaborando en esta situación pues considera que sufre acoso laboral para que deje la empresa.

El administrador fue condenado subsidiariamente al pago de los impuestos pendientes así como a los correspondientes intereses de demora, sobre la base de que la sociedad había cesado en la actividad, dejó de presentar regularmente sus declaraciones tributarias, y el administrador no promovió la disolución y liquidación de la sociedad.